El
mundo desde el punto de vista económico, se parece a un desierto,
aburrimiento y apatía recorren las pantallas, en realidad existen
situaciones internacionales graves, como la guerra civil en Siria, ó
la guerra en Yemen, muy poco difundida, la tensión en la península
de Corea, el boicot islámico en contra de Qatar, la sobre oferta del
petróleo y otras cuestiones que agravan el panorama o para otros, se
aplica el concepto de una crisis, una oportunidad. Quizás tenga que
ver con una percepción, porque este año se cumple una década del
inicio de la crisis financiera internacional.
El
G20 terminó sin muchas expectativas, a lo sumo se notó el
aislamiento de Donald Trump, hay que recordar su intención de
abandonar el Acuerdo de París. Alemania y Francia son las dos
cabezas europeas que garantizarían la continuidad de la unión y la
supervivencia del Euro, a pesar del Brexit.
Trump quiere echar a
Janet Yellen de la Reserva Federal(FED), la oposición quiere el
juicio político para Trump, los medios en EE.UU siguen obsesionados
con Rusia, y desde Moscú tampoco es muy claro el panorama. Hay que
recordar a Nixon y como un tema de espionaje lo eyectó de la Casa
Blanca, y en este 2017 un affaire 007 con la silueta de Putín parece
ser el talón de Aquiles del presidente norteamericano.
En
definitiva los números para que la economía norteamericana sin al
ayuda de la FED comience por si sola su camino ascendente, y a pesar
de haber aumentado la tasa de referencia, no logra generar un
convencimiento general del arranque económico. Algunos dicen que la
actividad es una muestra de fortaleza y que lo peor de la gran crisis
financiera del 2007/2008 paso a la historia, otros no piensan lo
mismo. Los temores a cualquier “Cisne Negro” en lo que
resta de este 2017 son para tener en cuenta, y la última de Trump,
quiere cumplir su promesa de campaña de aumentar los aranceles al
acero importado de China. También acuso al gigante asiático de
mantener sin ninguna modificación el intercambio comercial con Corea
del Norte, con lo cual la tensión parece aumentar, quizás tenga que
ver con otra percepción, ó una negociación hostil estilo Trump. Pero los grandes medios han hecho circular
las voces de importantes figuras del ámbito económico, que advierten
el peligro de una guerra económica, que puede frenar aún más, el
debilitado comercio mundial.
Gustavo Ruben Santuchi-Encalada